La playa se convierte para los niños en un lugar mágico donde jugar con la naturaleza y estimular sus sentidos. Y es que la estimulación de los sentidos es fundamental para el correcto desarrollo del niño.
Os propongo unos juegos sencillos para que vuestros hijos estimulen los diferentes sentidos .
Jugamos con la vista:
En busca de la bandera. Podemos enseñarle a nuestro hijo que en la playa siempre hay una bandera que puede ser de color verde, rojo o amarillo. Aprenderá lo que es una bandera y poco a poco la reconocerá entre todas las cosas que hay en la playa. Al llegar a la playa cada día, nuestra mirada va en busca de la bandera para descubrir de qué color está ese día, y aprovechar la ocasión para recordar los colores.
Jugamos con el oído:
Escuchando el mar. Tanto si estamos en una playa con poca gente como si estamos en una playa con mucho bullicio, podemos jugar a escuchar el mar. El juego es sencillo, solo hay que sentarse en la orilla y quedarnos en silencio. Tu hijo aprenderá a discriminar los sonidos y poco a poco logrará oír el mar.
Jugando con el tacto:
Construcciones de arena. A tu hijo le encantará hacer castillos, diferentes moldes de peces, pulpos, etc., hoyos, una muralla, presa, etc. descubrirá con tu ayuda que para poder hacer estas formas la arena debe estar mojada.
Construcciones de arena. A tu hijo le encantará hacer castillos, diferentes moldes de peces, pulpos, etc., hoyos, una muralla, presa, etc. descubrirá con tu ayuda que para poder hacer estas formas la arena debe estar mojada.
Jugando con el gusto:
Agua salada. Cuando te bañes en el mar con tu hijo te darás cuenta que un día sacará la lengua y querrá probar el agua.
Jugando con el olfato:
¿A qué huele la playa?.Identificamos los diferentes olores que podemos encontrar en la playa. Olemos el mar, la arena, las algas, nuestro cuerpo con crema de sol, ¿hay quizás un chiringuito cerca que huela a comida?